jueves, 12 de septiembre de 2013

Daroca, Zaragoza


Una de las villas más monumentales de Aragón


Muchas veces hemos pasado por Daroca de camino a otros lugares, y siempre, por unos motivos u otros, hemos aplazado la visita a esta ciudad que ya, desde la carretera nacional 234, se advierte como una ciudad antiquísima,  con mucha historia entre sus murallas y de claro origen árabe. 

En esta última ocasión recorrerla fue nuestro objetivo





Daroca está situada en pleno Sistema Ibérico, en el valle del Jiloca, afluente del Jalón, al sureste de la provincia de Zaragoza. Encajonada a los pies de dos montes, San Cristóbal y San Jorge. Con números vestigios de su pasado musulmán, da nombre a toda una comarca, la Comarca del Campo de Daroca.


De sus imponentes e interminables murallas medievales, de cuatro kilómetros de longitud, se dice que llegaron a tener ciento catorce torres, de las cuales algunas permanecen en pie: la Torre de los Huevos, de la Sisa, del Águila.  Al igual que algunas de las puertas de acceso, como la Puerta Alta, la del Arrabal o portillo de San Valero, el Portal de Valencia y la Puerta Baja o Fondonera, la más monumental, cuyo umbral es el acceso peatonal y del tráfico rodado a la calle Mayor.

               ↑ Puerta Baja

La Calle Mayor, que es la arteria principal de la urbe y que divide a Daroca en dos, es un barranco natural. En la edad media, las puertas de la villa se cerraban y cuando llovía fuerte se inundaba por completo, esto se resolvió construyendo un túnel paralelo a la Calle Mayor, llamado La Mina. Aún con esto, hubo una ocasión en que La Mina no dio abasto con toda el agua caída; las puertas estaban cerradas y taponada la Puerta Fondera con materiales arrastrados por el agua, la parte baja de la ciudad estaba ya anegada, cuando de repente, una gran piedra de molino bajo rodando por la calle Mayor y abrió la puerta de golpe, dando salida al agua acumulada. Esta gran piedra, el Ruejo, está expuesta a la entrada de Daroca, en el Paseo de la Constitución, frente a la Puerta Baja.



                                          ↑ Ruejo

Daroca es una de las villas más monumentales de Aragón, se la conoció como la ciudad de los siete sietes, ya que en su día tuvo; 7 iglesias, 7 conventos, 7 ermitas, 7 fuentes, 7 castillos, 7 plazas y 7 puertas, aunque, lamentablemente, no todo ha llegado hasta nuestros días.

La Colegiata de Santa María es un conglomerado de estilos; neoclásico, gótico, románico, con elementos platerescos y barrocos. En ella se conserva el relicario de oro que los Reyes Católicos regalaron para contener «Los Sagrados Corporales»reliquia que convirtió a Daroca durante siglos en un importante centro de peregrinación y que aún hoy se venera.

La Iglesia de San Miguel, en la parte más alta del casco antiguo, es de estilo románico, con numerosas alteraciones barrocas; la Iglesia de Santo Domingo, posee la torre mudéjar más antigua de Aragón.



                                        Colegiata de Santa María

Daroca cuenta con siglos de historia, en ella, además de iglesias en las que el románico se fusiona con el mudéjar, también podemos encontrar palacios, joyas representativas de la arquitectura civil de la zona, como la Casa Palaciega, junto a la puerta baja; la Casa de la Comunidad de Aldeas, antigua sede de la comunidad propulsora de lo que hoy son las comarcas; la Casa del Diablo, el Palacio de los Luna y un largo etcétera de patrimonio.


                ↑ Casa de los Soportales o Almudí
    

Daroca fue crisol de culturas; paseando por los antiguos Barrios de la Morería y de la Judería, descubrimos sus estrechas y empinadas calles, nos dejamos seducir por su encanto medieval y legendario. En Daroca la comunidad judía se dedicaba fundamentalmente a la artesanía y los tributos que pagaban duplicaban a los de la comunidad mudéjar, algunas de las calles, como la de los Hiladores, aún conserva su nombre desde antaño.




                 ↑ Fuente de los Veinte Caños

Recorrer sus murallas, construidas en tapial, ladrillo y piedra, es uno de los principales encantos de Daroca y son uno de los mejores testimonios de su pasado, recorrerlas en su totalidad es una caminata de senderismo de más de dos horas.

                     Mapa ruta de las murallas; wwwdaroca.es    

En Daroca cada verano se celebra el Festival de Música Antigua de Daroca, que ya ha celebrado su XL edición.

Daroca es nombrada en el Cantar del Mío Cid. Rodrigo Díaz de Vivar, campó y acampó por estas tierras; en su primer destierro sometió a la zona a parias; en otra ocasión, herido de gravedad, eligió Daroca para reponerse de sus lesiones.

Puso tributo a Daroca antes
luego a Molina, que está por la otra parte,
la tercera a Teruel, que está más adelante...”

Versos 866 y ss. CM
C

Daroca es punto de sellado del Camino del Cid 








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Gracias por tu visita ¡¡Hasta pronto!!
                                             
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